Belmont: Ni Izquierda, Ni Derecha, Soy Humanista

El Minuto | El posicionamiento mediático de Ricardo Belmont Casinelli, experimentado empresario y periodista, conductor de programas de TV, alcalde Lima en dos oportunidades, congresista de la república y además candidato a la presidencia del país, lo presenta ahora como un duro crítico del gobierno de Dina Boluarte Zegarra a quien avizora poco futuro político en el actual escenario de crisis que vive el Perú. El “hermanón” declara para El Minuto de América Latina y mundo hispano que, el pueblo, ha despertado.

Entrevista: Gary Ayala, Director de El Minuto en Perú

Los ácidos comentarios de Ricardo Belmont -convertido en un youtuber de consumo diario- sobre quienes ostentan ahora los poderes del Estado en el país blanquirrojo, son compartidos por sus miles de seguidores en redes. Sus apreciaciones, también revelan una simpatía por Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.

Cuál es la percepción que tienes sobre la oposición frente al gobierno de Dina Boluarte. ¿Hasta dónde puede llegar?

La oposición está creciendo en torno a un proyecto político inmediato que tiene que concretarse en el 2024 o antes. Considero que puede ser antes porque la gente está muy efervescente en estos momentos, por las muertes que ha habido de parte del gobierno de Dina Boluarte quien en una semana ya está siendo cuestionada en el mundo entero. No creo que Dina Boluarte dure mucho, creo que la respuesta de la gente se está dando en las calles y va a ser imparable.

Aparte de estos factores. ¿Cuáles crees que son las fortalezas de la oposición?

El planteo de un gobierno distinto, con gente nueva, fresca, no las mismas caras.  Hay que convocar nuevos líderes, hay que hacer desde ahora docencia política para las elecciones que vienen. Y, la oposición tiene que unirse en un solo puño como lo hacen ellos. Los que han tomado el poder ahora -a través de Dina Boluarte- lo planificaron hace mucho tiempo, esto no es una inspiración de la última semana desde que cayera Castillo, esto viene trabajándose desde el día 1. Desde el día 1 se tumbaron 70 ministros en una campaña de prensa que no la soporta nadie. Nadie aguanta una campaña de prensa de esa magnitud porque eso ya estaba hablado, ellos estaban observando quién era la persona que podía ser la que relevara a Castillo, que les sirviera a los intereses de los perdedores, porque los perdedores son los que ahora gobiernan desde el Congreso, Dina Boluarte es una etiqueta.

¿Cuáles estimas que son las fortalezas que sostienen al gobierno del Perú actualmente?

La prensa y los tanques en las calles, esas son las fortalezas. Y la prensa, en la medida en que -esta prensa monopólica, oligopólica, que pierde poder con las redes sociales- con el nuevo periodismo se va a caer porque la gente ya no cree tanto en ella. Antes, era muy poderosa en las elecciones, pero ahora con las redes sociales, con los medios alternativos estamos trabajando muy bien. Las radios de provincias que han tomado otra dimensión con las redes también le ha quitado el poder que tenía, ese poder de construir una realidad que no existe.

¿Esto nos colocaría ante dos países llamados Perú? Uno, el de los medios tradicionales y el otro el del periodismo alternativo ¿Cuál es tu comentario?

Sí, son dos realidades. El presidente de México define muy bien el tema, Andrés Manuel López Obrador, él dice: “Señores acá tenemos a los grandes intelectuales que no conocen lo que siente la calle, los grandes periodistas que escriben desde un café, desde un lugar ajeno a lo que siente la gente, y después tienen a la otra prensa, que es la prensa que ha surgido ahora, que está mucho más cerca a la realidad” a través de mecanismos como el que utilizas para grabar en este momento. Permite opiniones más acertadas y más cercanas a lo que piensa la calle, o sea que hay una lucha de poder de baja intensidad que hacen los medios de información.

Tú has visto transcurrir a varias generaciones del país ¿Cuál crees que es la herencia que se deja a la juventud que vive esta coyuntura?

Primero, las nuevas generaciones no entienden, porque tienen mucha información. Hay tanta información que el ser humano no puede procesarla, y si va con un 90% de mentiras hay una enorme desinformación que está confundiendo a los jóvenes. Es necesaria una prensa distinta, medios distintos que puedan contar una historia más cercana a la gente y despertar. Hay un letargo todavía.

En tu activismo cívico ¿Cómo te identificas frente a esta coyuntura? ¿Cuál es tu rol?

No soy de centro, ni de izquierda ni de derecha. Soy un humanista que cree en el hombre como clave en la construcción de este movimiento filosófico que es el movimiento Obras. Obras, se mueve como una filosofía humanista. Primero, la cabeza tiene que ser transparente cien por ciento, dar el ejemplo de lucha y de liderazgo, buscar hombres que sueñen y crean en lo mismo porque de lo contrario no hay unidad de cuerpo. La sociedad es un organismo vivo, es una cosa que tiene piernas, brazos y cabeza. Cuando la cabeza no piensa, no funciona y no sabe cuál es camino, a dónde va, el cuerpo se queda inerte.

Tenemos un sistema que permite partidos como los que tenemos en el Congreso. Ante nuevas elecciones vamos a continuar con políticos similares ¿Qué opinas?

Primero, depende quiénes llegan. Si llegan los mismos partidos tendremos los mismos resultados. Esa es la frase de Einstein, si tú haces lo mismo y sigues la misma ruta vas a llegar al destino inexorable, el mismo destino, vas a cometer los mismos errores. Esto tiene que cambiar, creo que viene un gran cambio, se experimentó con Castillo, perdió una gran oportunidad, un hombre sin criterio ninguno para gobernar, escuchaba a uno, escuchaba al otro, no sabía a dónde iba. Cuando la cabeza se emborracha con el poder -por decir un término fácil de entender- no puede gobernar. Aquí tiene que llegar gente que tenga experiencia para conducir a gente joven que ocupe cargos, que ocupe un lugar importante en la política para que ejecuten lo que piensan las personas con experiencia.

Los griegos siempre tenían a los mayores de 60 años – ¡Era difícil llegar a los 60 años en esas épocas! – Estamos hablando de seis siglos antes de Cristo para construir la democracia que hoy día tenemos, ellos son los gestores. Si no hay una buena democracia esto deriva en una tiranía como está ocurriendo ahora, estamos en una situación complicada.

La comunidad internacional nos observa. ¿Qué le puedes decir como peruano a partir de esta situación?

Bueno, hace años leí un libro, América Latina, Una Sola Nación. Debemos darnos cuenta de lo que somos, como potencia y la riqueza que tenemos. La capacidad de trabajo que tiene el latinoamericano es muy distinta al europeo y al norteamericano, ellos terminan a las cinco de la tarde y se acabó, acá el peruano trabaja día y noche. Peruanos y latinoamericanos en general padecemos de los mismos males y tenemos los mismos remedios para sanarnos en nuestras sociedades.

Estoy convencido de que con la riqueza que tienen nuestros pueblos no debería haber un solo pobre. Habría que hacer lo bueno que hacen los otros países. Primero, tienen una autoestima enorme, le han creado a su población una autoestima de saberse que pueden cambiar. Muchos países que nosotros vemos como países capitalistas son muy nacionalistas, defienden lo suyo antes que lo ajeno. Nosotros, no hemos defendido al Perú nunca. San Martín, se fue de aquí llorando porque no pudo convencer a las élites de la época de que había que cambiar y tuvo que venir Bolívar.

Estoy muy entusiasmado por este golpe en que nos ha metido, Castillo, porque él ha sido un fracaso en términos de que no supo aprovechar la oportunidad para llamar a la mejor gente. Nunca se había dado esto en la historia del país y está ocurriendo lo mismo en otros países. Si no tomamos conciencia de la unidad latinoamericana nos van a ir eliminando uno por uno.

Años atrás, salías ante cámaras como haciendo footing ¿Sigues mirando con optimismo al Perú?

Bueno, no tanto, era muchacho, he visto mucha traición, fracaso y mucha desilusión con los políticos que nos han gobernado. Estuve muy cerca de Fujimori en los primeros dos años de gobierno, sentía que juntos podíamos hacer maravillas, habíamos ganado como independientes, yo, el primer independiente, él, el segundo, había una especie de alianza tácita, pero después, cuando cambia la Constitución, nos engaña, nos miente, el proyecto fujimorista era instalar el neoliberalismo a lo bestia que es lo que ha ocurrido ahora y viene el primer fracaso donde me restan un 5% de esperanza. Cada presidente me ha quitado un pedazo de ese optimismo. Si antes estaba al 100% ahora estoy al 70%.

Sin embargo, ¿Estimas que impulsas una mejor forma de vivir?

Creo en la gente, así como ustedes que han venido. Son más jóvenes, tienen experiencia y han visto la cancha. Estoy dispuesto siempre a conversar con gente que viene a hablar de un proyecto. Si nos unimos vamos a ir encontrando las cosas que nos unen y no las que nos dividen. He ido estudiando qué le ocurrió a Estados Unidos en la década del ’60 que la viví intensamente ¿Cómo se pudo poner de acuerdo para seguir siendo potencia si tiene la gama más grande de migrantes del mundo? Los convirtió en ciudadanos americanos, allá hubo hasta esclavitud. ¿Por qué nosotros no podemos unirnos? Hay una frase buenísima: “No hay que hacer lo que ellos nos dicen, sino hacer lo que hacen”. Ellos nos dicen: “Muchachos, hagan esto” entonces les damos nuestra riqueza y vienen sus inversiones. Anda a Estados Unidos a explotar una mina, no entras, allí no entra nadie. Tenemos que aprender de ellos si queremos ser potencia.