el minuto

Noticias

Svalbard: Un escenario clave en la nueva Guerra Fría

El Minuto | Las islas Svalbard, pertenecen a Noruega. Están regidas por un régimen especial, consecuencia de un tratado vigente desde 1920. Por su posición geográfica, y la creciente competencia en la región del Ártico, estas islas cobran especial importancia, donde incluso se ha incorporado un nuevo actor, China, que genera preocupación para los responsables de la seguridad de Noruega.

Por el Dr. Jorge Alejandro Suárez Saponaro | Director de Diario El Minuto para Argentina

Las islas Svalbard, eran conocidas como el lugar “donde no se puede morir”. Su clima frío, impide que los cadáveres entren en proceso de descomposición. El permafrost, incluso genera el riesgo que los virus queden en los cuerpos. Es por ello que, desde hace tiempo, quienes mueren en las islas, son enviados al continente, o llegado el caso incinerados. Tampoco hay nacimientos, dado que el hospital local, no está preparado para ello. En cierto punto, la población está de “tránsito”. Más allá de la anécdota, por su posición geoestratégica, el archipiélago es escenario del nuevo conflicto del siglo XXI: la competencia por el Ártico.

Estamos ante un archipiélago de 61045 km2, destacándose las islas Spitsbergen (39.000 km²), Nordaustlandet (14.600 km²) y Edgeøya (5000 km²). Otras de importancia son: Barentsøya, Lågøya, Hopen, Danskøya, Kvitøya, Wilhelmøya.  El 60% del territorio está cubierto de glaciares, pero se está viendo las consecuencias del calentamiento global.  La población está estimada en unos 3.000, concentrados en gran parte en el centro administrativo de Longyearbyen.  

El gobierno noruego está representado por un gobernador. Jurídicamente las islas, no forman parte de ninguna entidad territorial noruega, estamos ante un territorio especial.

Las islas fueron descubiertas en 1596 por el navegante neerlandés Willem Barentsz, en su búsqueda de nuevas rutas marítimas. En 1604 fue el primer desembarco, cuando marinos ingleses, llegaron a las islas de los Osos, para cazar morsas. Desde ese entonces, la actividad de caza de mamíferos marinos se centró en la isla Spitsbergen. El área se transformó en centro de disputas entre compañías francesas, dinamarquesas, neerlandesas e inglesas. A fines del siglo XVII aparecieron cazadores de origen ruso.  La actividad ballenera duró hasta principios del siglo XIX.  A fines del siglo XVIII aparecieron los primeros cazadores noruegos. La reducción de la caza de ballena, provocó que la presencia tanto rusa como noruega desapareciera prácticamente de las islas.

El descubrimiento de carbón, les dio nuevamente valor a las islas, y desde 1899, los noruegos iniciaron la explotación de los yacimientos. Siguieron británicos y estadounidenses. El gran explorador Fridtjof Nansen fue un activo promotor de los intereses árticos en la sociedad noruega. En 1907, el gobierno noruego tomó una serie de iniciativas para debatir el estatus de las islas, con el objetivo de hacer valer sus derechos e intereses. Rusia era el otro gran interesado en el territorio.

En 1910, comenzaron los debates en torno a la soberanía de las islas, interrumpidos por la Primera Guerra Mundial. En 1920, en la Conferencia de París, fue aprobado el Tratado de Svalbard, por el cual era reconocida la soberanía noruega, pero con limitaciones, dado que los países signatarios (41, incluyendo a la Argentina) tenían derechos de pesca, caza y explotación minera.  La posición neutral de Noruega en la Gran Guerra, sin ninguna duda ayudó a reconocer sus reclamos soberanos, sobre los intereses de Rusia, que buscaba también hacerse con el control de las islas

El régimen del tratado, impide que Noruega pueda gravar con impuestos la actividad de las empresas de los países signatarios, como tampoco estos pueden fijarlos. Los habitantes de Svalbard, solo pagan impuestos para el sostenimiento de la administración local.  Los vínculos entre Noruega y las islas están regulados por la llamada Ley Svalbard, que las considera parte del Reino, con un gobernador, pero, no forma parte de ningún condado.

Un hecho curioso, fue que China, firmó el tratado, a instancia de los franceses para lograr apoyo a los intereses de París. Ironías del destino, quién era un actor ausente en la cuestión, luego de setenta años, Pekín emergió como una potencia, con intereses muy concretos en el Ártico, y el tratado de Svalbard, abrió las puertas para proyectar la influencia china en dicha región.

En 1925 fue designado el primer gobernador noruego.  La minería del carbón, llegó a producir 500.000 toneladas repartidas equitativamente entre los gobiernos noruego y soviético. Moscú hizo una fuerte apuesta a dicho sector, llegando los trabajadores soviéticos – en su mayoría rusos y ucranianos – a ser la mayoría de la población de las islas.

En la Segunda Guerra Mundial, con la ocupación alemana de Noruega, las islas siguieron produciendo carbón, donde los intereses soviéticos eran cada vez más relevantes. En 1941, en el marco de una operación conjunta ente la Unión Soviética y el gobierno exiliado noruego, las instalaciones existentes fueron evacuadas y destruidas. Los alemanes intentaron establecer una base de observación, que duró hasta 1942, cuando fue evacuada ante la presencia de la Marina Real británica.  En septiembre de 1943, los alemanes protagonizaron la Operación Zitronella, destruyendo instalaciones noruegas.  En 1944, los alemanes regresaron e instalaron una estación meteorológica, que fue desmantelada en 1945.

Desde 1950, la Unión Soviética, con la finalidad que la OTAN, no desplegara bases en Svalbard, tuvo una importante actividad civil, construyendo infraestructuras para la industria del carbón, alojamientos para los trabajadores y funcionarios. Las comunidades noruegas y soviéticas no tenían punto de contacto entre sí, tenían sus propios sistemas postales, servicios básicos brindados por sus propios gobiernos. Moscú siempre puso objeciones a las actividades noruegas, especialmente con la instalación de una estación de investigación espacial europea, como la construcción de aeropuertos privados.

Desde 1960, comenzaron los vuelos chárteres entre Noruega y las islas y en 1975, fue inaugurado un aeropuerto en la capital del territorio Longyearbyen. Esto generó protestas de la Unión Soviética, superadas luego que fueran establecidos vuelos regulares con este país y el archipiélago.  La actividad minera del lado noruego decayó, luego de importantes accidentes, destacándose el incidente de 1962, que mató a 21 personas, considerado un escándalo nacional y provocó la caída del gobierno de aquel entonces. Noruega al convertirse en un país petrolero, dejó de lado el carbón como fuente de energía, lo que llevó a la empresa responsable de su explotación al cierre paulatino de las minas.

El gobierno noruego en 1977 creó una zona de protección pesquera de 200 millas. Esto abrió las puertas para conflictos de interpretación del Tratado de 1920. Bajo el amparo del régimen de protección pesquera, autoridades noruegas han capturado barcos de bandera española, rusa e islandesa, generando intercambios diplomáticos entre las partes y protestas. La campaña de exploración petrolera llevada a cabo por los noruegos, llevó a protesta de Rusia, al considerar que el tratado es aplicable a los espacios marinos y plataforma continental, algo que rechaza Oslo, dado que dicho texto no dice nada al respecto. 

El régimen de la Convención del Mar, sancionado en 1982, impulsó a las autoridades noruegas a presentar un reclamo sobre derechos de soberanía, que lo proyectan hacia el Polo Norte, gracias a su presencia en Svalbard. Esto abre puertas a nuevos conflictos, no solo por la interpretación del Tratado, sino por los criterios de delimitación de jurisdicciones marítimas.

El potencial en materia de hidrocarburos y gas, ha cobrado especial importancia, por la guerra de Ucrania. Noruega, se ha convertido en un jugador clave y ello impulsó a incrementar la campaña de exploración en el Mar de Barents, es por ello que las islas Svalbard juegan un rol particular, donde se cree que en sus aguas adyacentes hay un enorme potencial en hidrocarburos. El carbón, volvió otra vez a ser protagonista, para la ira de los ecologistas.

La empresa pública noruega que lo explota Store Norske Spitsbergen Kulkompani (SNSK), anunció que la mina operará hasta 2025, prolongándose su vida útil. Un cambio radical de la política de la empresa, que durante las últimas dos décadas vino desactivando minas, quedando solo el número 7 con una producción de 90.000 toneladas, siendo su mercado las industrias del acero y química de Europa, y ahora también para la generación de energía.

Luego de la disolución de la Unión Soviética, los rusos, mantuvieron una presencia decreciente. En 1998, la explotación minera de Pyramiden, fue cerrada por Rusia, quedando solo abierta la mina de Barentsburg y con una población muy reducida, en comparación a otros tiempos, unos 600 habitantes. La guerra de Ucrania ha tensado las relaciones entre Oslo y Moscú. Estas se venían enfriando desde la anexión de Crimea en 2014. Vale la pena recordar que Noruega forma parte de la OTAN y en julio de 2023, fue resuelta una crisis, en la cual contenedores con víveres rumbo a bases rusas, fueron detenidos por autoridades noruegas en Kirkenes.

Finalmente, la disputa fue zanjada, y Moscú aceptó que buques de bandera noruega llevaran los contenedores a la base rusa de Barentsburg en Svalbard.  El apoyo noruego al esfuerzo de guerra de Ucrania, genera tensiones y alimenta constantes reclamos de Moscú de incumplimiento del tratado de 1920. No existe posibilidad, de una acción militar, pero Rusia, tiene una herramienta para generar presión. El diálogo entre las partes se ha ido limitando cada vez más, y la creciente presencia china en las islas, aliado estratégico del Kremlin, genera una fuerte preocupación para los responsables de la seguridad en Noruega.

China por medio de su Instituto de Investigación Polar en el tercer asentamiento más grande de Spitsbergen, Ny-Alesund. El interés de Pekín, comenzó a ser realidad en 1991, enviando personal científico a las islas. Esto lo transforma en otro actor con intereses contrarios a los noruegos, pero que pueden hacer causa común con Rusia.  Oslo ve con suma preocupación, la llamada “diplomacia científica” con el temor que ingreses nuevos actores, que, bajo el pretexto de llevar a cabo investigaciones, planten bandera. China se considera a sí misma como un actor con intereses en el Ártico, no en vano, tiene intereses económicos en Groenlandia e Islandia.

El cambio climático, abre nuevas rutas alternativas a través del citado océano. Los puertos rusos en Siberia, cobrarían valor, y Moscú busca en su aliado chino, un contrapeso adecuado para sus intereses en la región.

El Tratado de Svalbard, establece un régimen desmilitarizado, es por ello, que, para más de un experto, estamos frente al “flanco débil” de la OTAN, y donde están presentes intereses contrapuestos: Rusia, China y Noruega.  Oslo subsidia a la población de las islas, con el objetivo de garantizar su presencia y evitar que el equilibrio demográfico sea favorable a los rusos.

El mantenimiento de la actividad minera abre nuevas perspectivas, de generación de empleo y evitar la emigración de la población. El archipiélago, desde la inauguración del aeropuerto, tiene una creciente actividad turística, no exenta de críticas por su impacto ambiental, y otra fuente de recursos, en la presencia de instalaciones de investigación científica, que atrae habitantes y demanda servicios locales. El gobierno noruego ha realizado esfuerzos importantes para que la población viva en un ambiente tan hostil.  No solo garantiza las comunicaciones con el mundo exterior, servicios públicos, sino que desde fines de los 90 opera un Centro Universitario para 350 estudiantes de grado y posgrado.

En materia institucional, las islas estaban administradas de hecho por la empresa que operaba la mina de carbón, que era responsable de los servicios públicos de la capital. En 1971 fue creado el Consejo de Svalbard, de carácter consultivo y con miembros designados.  En 1993, fueron permitidas las elecciones con participación de los partidos políticos en dicho consejo y luego en 2002, el Consejo Comunitario de Longyarbyen, asumió las facultades del Consejo de Svalbard, con competencias en materia cultural, educativa y servicios públicos esenciales.

En el marco de los programas de investigación, la Fundación Bill Gates, financió el Banco Mundial de Semillas, almacena millares de ejemplares, gracias a las condiciones climáticas y aislamiento de la región.  Svalbard también es un área donde claramente está reflejado el cambio climático. El Instituto Polar Noruego, puso en evidencia que la temperatura ha subido cuatro grados en cincuenta años. Esto queda reflejado en la reducción de los glaciares, desprendimientos de tierra, dado que el calentamiento provoca cambios en el permafrost, cambios de hábitos en los animales de la zona. La dificultad de encontrar focas como consecuencia de los cambios en el clima, lleva a los osos polares a extender su área de caza a zonas urbanizadas, con los riesgos asociados. El ambiente marino también se ve afectado.  

Las islas Svalbard, no solo son un destino turístico excéntrico, sector que es la principal fuente de recursos del territorio, sino un espacio de colisión de intereses. Noruega como parte de la OTAN, al enviar ayuda militar a Ucrania, tiene una postura beligerante respecto a Rusia, aunque ambas partes no lo quieran reconocer abiertamente.

Las islas tienen un valor clave desde lo militar para Moscú, dado que pueden ser empleadas bloquear las operaciones de la poderosa Flota del Mar del Norte y su acceso a las aguas del Atlántico. El Kremlin ha sido especialmente sensible por las actividades científicas, con el temor que encubran operaciones de inteligencia. La misma postura tiene Oslo, respecto a la presencia de China.

Nuevamente este territorio lejano, vuelve a convertirse como en la Guerra Fría, en un área de tensiones y desconfianza permanente, contrario al espíritu del Tratado de 1920, que buscaba generar un espacio de cooperación y paz, al abrir el territorio a la explotación económica sin discriminación y en pie de igualdad.

Nacional

El Minuto | Durante los días 17 y 18 del presente mes de abril se realizó la 6ta Cumbre Ministerial Global de Seguridad del Paciente...

El Minuto | El gobernador regional de Valparaíso, Rodrigo Mundaca, ha elevado el debate sobre la posible reintroducción de la pena de muerte en Chile,...

El Minuto | Ecocopter, empresa aeronáutica y de aeroservicios chilena líder en el Cono Sur de Latinoamérica, tuvo una destacada participación en FIDAE 2024, gracias...

El Minuto | Una misión comercial de Taiwán compuesta por 25 empresas se encontrará de visita en Chile desde el 17 hasta el 19 de...

El Minuto | El diputado del Partido Socialista (PS), Daniel Manouchehri, ha presentado una polémica propuesta que busca la prohibición del ingreso de ciudadanos venezolanos...