Con 99 votos a favor, 2 en contra y 12 abstenciones, la Cámara de Diputados aprobó este martes el proyecto de ley que obliga al Presidente de la República, ministros de Estado, subsecretarios, parlamentarios y candidatos a cargos municipales —como alcaldes y concejales— a someterse de manera obligatoria a un test de drogas anual.
La iniciativa, impulsada por legisladores de oposición, también contó con apoyo de parte del oficialismo. Las únicas votaciones en contra fueron de las diputadas del Frente Amplio, Lorena Fries y Maite Orsini. En tanto, las 12 abstenciones provinieron de parlamentarios del Frente Amplio, el Partido Comunista y el Partido Socialista.
Proyecto retorna a comisión con tramitación urgente
Debido a que el proyecto recibió indicaciones, deberá volver a la Comisión de Gobierno, presidida por el diputado Rubén Oyarzo (Partido Radical), quien señaló que se le dará tramitación urgente. “Creemos que es fundamental que esta normativa esté vigente antes de las elecciones municipales de noviembre”, sostuvo.
Por su parte, la diputada Paula Labra (RN), una de las impulsoras del proyecto, valoró su aprobación. “El consumo de drogas no es compatible con el ejercicio de cargos públicos, especialmente en un año electoral como este”, afirmó.
Petición al Presidente Boric para priorizar la iniciativa
En paralelo, la Cámara también aprobó un proyecto de resolución solicitando al Presidente Gabriel Boric que otorgue urgencia legislativa a la propuesta.
La diputada Yovana Ahumada (PDG), coautora junto a Labra y la parlamentaria Pamela Jiles, expresó: “Esperamos que el Ejecutivo no se quede en el discurso y también se haga parte de este proceso”.
Según establece el proyecto, el test de drogas deberá aplicarse al menos una vez por año durante el ejercicio del cargo, a través de una muestra de cabello procesada en un laboratorio autorizado por el Ministerio de Salud. Los resultados serán de carácter público.