Exigen en la ONU el derecho de autodeterminación del Pueblo Saharaui
El Minuto | El Comité sobre Cuestiones Políticas Especiales y de Descolonización (Cuarta Comisión) de la Asamblea General de las Naciones Unidas concluyó ayer sus debates sobre el tema de los territorios no descolonizados, incluido el Sáhara Occidental, la última colonia de África.
La situación en el Sáhara Occidental se ha deteriorado particularmente desde el 13 de noviembre de 2020, cuando Marruecos atacó a civiles saharauis que se manifestaban pacíficamente en la zona de amortiguamiento de El Guerguerat, en el extremo suroeste del Sáhara Occidental, para exigir el cierre de la brecha ilegal creada por Marruecos en violación del alto el fuego de 1991.
En este contexto, se desplazaron hasta la sede de la ONU en Nueva York una decena de parlamentarios, activistas y defensores de los DD.HH de diferentes partes de Europa, para exhortar y pedir a la ONU concluir el proceso de descolonización en el Sáhara Occidental.
Los participantes destacaron, ante la 4ª Comisión de la Asamblea General de la ONU, en Nueva York, que el Sáhara Occidental es un caso de descolonización y ocupación ilegal por parte del Reino de Marruecos, en violación del derecho internacional humanitario, acusando, entre otras cosas, al Estado ocupante de negarse a organizar un referéndum de autodeterminación alegando que sería más adecuado un plan de autonomía.
Alberto Maestre Fuentes, doctor en Historia por la Universidad de Barcelona, intervino como peticionario en los debates de la Cuarta Comisión de descolonización de Naciones Unidas. “Hoy tratamos sobre el Territorio No Autónomo más extenso y poblado de los 17 que existen en la actualidad. Años de investigación y pertenecer al único Centro español universitario de Estudios sobre el Sahara Occidental, de la Universidad de Santiago de Compostela, avalan mi presencia hoy aquí”, así arrancó Maestre su intervención ante la ONU.
Maestre ha lamentado que a pesar de que la Asamblea General ya desde la década de los años sesenta aprobó Resoluciones solicitando reiteradamente el ejercicio del derecho de autodeterminación del pueblo saharaui, todavía, después de tanto tiempo, tal derecho no ha podido ser ejercitado.
“Es momento de recordar que la potencia administradora, España, que se comprometió ante el pueblo saharaui y ante Naciones Unidas a celebrar el referéndum de autodeterminación no ha honrado su compromiso. Esta es la principal causa de que en África no se haya cerraddo el último capítulo de la descolonización”, recalca.
El historiador español afirma que la estabilidad de África requiere el respeto incuestionable a las fronteras heredadas del colonialismo en aras de evitar futuros conflictos territoriales. “Si no se cumple esta premisa fundamental, se estará abriendo la puerta a que surjan nuevos conflictos territoriales”, agrega.
“Las Resoluciones de la Asamblea General son bien claras y no caben interpretaciones que nieguen el derecho legítimo de los pueblos colonizados proclamado en la resolución 1514”, subraya.
Para Maestre, el conflicto saharaui debe ser solucionado, una vez por todas, para lograr una solución “que conduzca a la libre determinación del pueblo del Sahara Occidental”. “No estamos hablando de un conflicto artificial: hay una guerra en curso, aunque sea de baja intensidadd; hay decenas de miles de refugiados, hay víctimas de la represión marroquí por exigir el respeto a las resouciones de la Asamblea General”, denuncia ante la ONU.
Subraya que ualquier otra propuesta, tenga el contenido que tenga, que no parta del reconocimiento del derecho a la autodeterminación e independencia debe ser rechazada de plano. No solucionará este problema y engendrará otros. “Si queremos ser realistas, hay que partir de la realidad: un territorio dividido por un muro que viola los derechos humanos, con una parte ocupada por Marruecos y una parte bajo el control del Frente Polisario y la República Saharaui”, recuerda.
“Como historiador sé que otros conflictos del pasado han podido ser superados más fácilmente de lo que parecía en un principio. El conflicto del Sáhara Occidental no es complicado. La solución está ya formulada. Sólo es un problema de tener voluntad de aplicar la solución”, afirma.
Lamenta que demasiadas décadas de desconfianza han dejado mella entre ambas partes, pero hay que buscar lo que une a los dos pueblos enfrentados, el marroquí y el saharaui, intentando dejar de lado lo que les separa. “Es esencial dotar a la MINURSO de más competencias, especialmente en materia de derechos humanos y condenar las acciones unilaterales que deterioren la situación obstaculizando la aplicación del derecho a la autodeterminación y a la independencia”, concluye.
